OS PRESENTO UN ARTÍCULO PARA UNA NUEVA COLABORACIÓN, EN EL GRUPO NOTICIAS, EN LA REVISTA STYLO
Se dice por ahí que moda es aquello que está en boga durante algún tiempo, especialmente los trajes, telas y adornos. Recapacitando sobre la definición, llegaremos a la conclusión de que podríamos prescindir del contexto temporal de la misma. Hoy, la moda alcanza muchas más cosas que el precioso vestido de temporada o el complemento de actualidad. Es cierto que cambian los materiales, las formas, los cortes, la manera de lucir… Pero la moda, el concepto moda, así, en general, no cambia porque está de moda.
Los tiempos han traído la moda a nuestras vidas y ella se ha quedado a vivir con cada uno de nosotros. Inunda el cine, las vallas publicitarias, los blogs y la televisión. Es difícil escapar de ella. Incluso aquellos que se niegan a seguirla se ven obligados a comulgar con sus dictados, aunque se empeñen en elegir un color o un diseño anticuado. Lo explica bien claro la periodista Miranda Priestly (Meryl Streep en El diablo se viste de Prada) cuando reprueba el comportamiento de la protagonista de la película, una secretaria escéptica del negocio, que luce, con muy mal gusto, un jersey azul cerúleo creyéndose a salvo de las tendencias:
- En 2002, Oscar de la Renta incluyó el azul cerúleo en su colección. Luego, Saint Laurent diseñó chaquetas con ese color. Más tarde el azul cerúleo apareció en las colecciones de ocho diseñadores diferentes. De ahí se filtró a los grandes almacenes y desde ellos llegó al chiringuito donde tú lo has comprado.
Y es que ese arte que es la moda, tiene la capacidad de ir de lo más exclusivo a lo más común. No hay revista que no posea una sección de moda, las pasarelas se han trasladado a las calles y los diseños se han hecho visibles, deseables y accesibles ya que firmas menos glamurosas se encargan de fusilarlos. Además, la moda, tiene el atractivo de la diversión: la música y la imagen que la rodean, el movimiento y la actividad que transmite; el interminable mundo de las compras.
En esa escala de valores, no debemos olvidarnos de los diseñadores menos conocidos, esos que viven junto a nosotros y que luchan por ofrecernos sus creaciones. Es importante recordarles que contamos con ellos. Premiar moda es premiar algo completo porque engloba creatividad, innovación, y actividad económica. Arte e industria. Diseño y formato de negocio. Por tanto, desarrollo.
Los tiempos han traído la moda a nuestras vidas y ella se ha quedado a vivir con cada uno de nosotros. Inunda el cine, las vallas publicitarias, los blogs y la televisión. Es difícil escapar de ella. Incluso aquellos que se niegan a seguirla se ven obligados a comulgar con sus dictados, aunque se empeñen en elegir un color o un diseño anticuado. Lo explica bien claro la periodista Miranda Priestly (Meryl Streep en El diablo se viste de Prada) cuando reprueba el comportamiento de la protagonista de la película, una secretaria escéptica del negocio, que luce, con muy mal gusto, un jersey azul cerúleo creyéndose a salvo de las tendencias:
- En 2002, Oscar de la Renta incluyó el azul cerúleo en su colección. Luego, Saint Laurent diseñó chaquetas con ese color. Más tarde el azul cerúleo apareció en las colecciones de ocho diseñadores diferentes. De ahí se filtró a los grandes almacenes y desde ellos llegó al chiringuito donde tú lo has comprado.
Y es que ese arte que es la moda, tiene la capacidad de ir de lo más exclusivo a lo más común. No hay revista que no posea una sección de moda, las pasarelas se han trasladado a las calles y los diseños se han hecho visibles, deseables y accesibles ya que firmas menos glamurosas se encargan de fusilarlos. Además, la moda, tiene el atractivo de la diversión: la música y la imagen que la rodean, el movimiento y la actividad que transmite; el interminable mundo de las compras.
En esa escala de valores, no debemos olvidarnos de los diseñadores menos conocidos, esos que viven junto a nosotros y que luchan por ofrecernos sus creaciones. Es importante recordarles que contamos con ellos. Premiar moda es premiar algo completo porque engloba creatividad, innovación, y actividad económica. Arte e industria. Diseño y formato de negocio. Por tanto, desarrollo.
Para revista Stylo (Grupo Noticias)
2 comentarios:
¡Qué tal Lázaro!
Aquí ando, ojeando tu blog. En cuanto a este artículo echo en falta alguna referencia a los orígenes de la moda. Todo eso de cuándo comenzó a exaltarse lo nuevo y lo efímero ante lo antiguo y permanente, Baudelaire y las Vanguardias en el XIX, etc.
Por lo demás, me parece que te has montado un buen espacio.
Saludos y Suerte.
Aire
Hola Aire, me alegra recibir tu comentario. La próxima vez tendré en cuenta a nuestro admirado Baudelaire que no se me había ocurrido. Pero quizás tampoco fuera muy a tono con la publicación. Que enseguida nos ponemos muy pesados los sociólogos con nuestros autores y hay que dar un respiro al lector.
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